martes, 28 de abril de 2009

Edinburgh XXVIII



Estoy cambiando, mutando. Mis miembros dormidos, van despertando, y molestan. Me recuerdan que tengo que engrasar todo el motor para ponerme en movimiento. Alcanzaré altas velocidades, por lo que una rehabilitación a fondo va a ser necesaria. Luego no habrá tiempo para descansos o tiempos muertos; o tal vez sí, pero nunca se sabe cuando va a ocurrir, así que toca prepararse, estar listo para todo lo posible. Lo posible toma una forma indefinida con límites borrosos. Es un agujero negro que impide ver el horizonte; pero siempre trae sorpresas. No me acabo de acostumbrar a este tipo de incertidumbres, pero siempre ha sido así.Los humanos tenemos la memoria de los peces. Me miro al espejo, y lo que veo no lo reconozco. Estoy cambiando pero sólo yo lo noto. No puedo decir si me gusta o no, porque todo es extraño y nuevo para mi. No alcanzo a entender qué me pasa, es una sensación , no es que sea algo físico, por lo que es muy díficil que me ayuden. Tendré que mudarme yo sola y ver qué sorpresa me espera, ahí fuera y dentro.

2 comentarios:

Aina Rubies dijo...

oleeeeee
parece que llega la primavera!!!!!

ir-n dijo...

Vivan las mutaciones!! VIVA!!
;) mil besos y mucha alegría para esta transformación.
Que la primavera dure la vida entera, por favor!!
Muackaaa